Un domingo que no tenía nada interesante en la nevera, recordé que tenía un tarro de setas deshidratadas, en concreto eran trompetas de la muerte. La verdad que esta forma de conservarlas es muy útil ya que podemos tenerlas en la despensa, para días como éste.
Hay que hidratarlas con unas
horas de antelación, por la tipología de seta, bastante fina y con poco tallo,
las puse a remojo en una fuente grande durante 5 horas y se hidrataron
perfectamente.
Para darles más vida, las hice
en arroz, para probar el sabor que desprende esta seta en un caldo. Hubo
diversas opiniones, a mí me encantaron pero al otro lado, pareció demasiado
fuerte el sabor.
Para dos personas utilicé:
5 cazos de arroz bomba (prefiero
que sobre). Este tipo de arroz da la bienvenida al caldo, hinchándose y
teniendo más sabor que el habitual que compramos.
12,5 cazos de caldo (en este
caso de pollo, porque era lo que tenía, pero si tenéis verdura mucho mejor,
hecho por vosotros o comprado, la segunda opción cada vez está mejor
conseguida)
Un par de ajos
250 gramos de setas (yo
utilicé trompetas de la muerte)
AOVE
Escamas de sal
Ponemos a freir a fuego lento
los ajos en el aceite en una olla pequeña, ya que la receta es para dos, cuando
se han sofrito los ajos, añadimos las setas y les damos vuelta con el ajo para
que cojan sabor. Posteriormente, echamos el arroz y rehogamos un par de
minutos.
Cuando está todo entremezclado
echamos 4 cacitos de caldo y seguimos a fuego lento, removiendo, lentamente
veremos que el arroz engulle el caldo estando más jugoso. Poco a poco vertemos
otros cacitos para que siga engordando el arroz, en 20 minutos o un poquito
más, a fuego lento siempre que veamos que cueza, veremos que el arroz está en
un punto blandito pero no pasado. Debemos probarlo.
A mí me gusta mucho echar
escamas de sal al arroz en vez de la sal refinada, ya que me gusta encontrarme
estos tropezones. Animaros y probad porque es una forma diferente de comerlo.
Cuando esté terminado dejamos
reposar para que el poquito de caldo que quede sea acogido por el arroz y
listo!
¿Qué trucos tenéis con el
risotto?